lunes, 11 de mayo de 2009

Cierto exceso de peso baja el riesgo de muerte

Hace alrededor de dos años, un equipo de científicos estatales informó que las personas con sobrepeso tienen una tasa de mortalidad más baja que las personas con peso normal, bajo peso u obesas. Ahora, después de seguir investigando, el mismo equipo identificó las enfermedades que más influyen en la mortalidad según el peso corporal.

En esta primera asociación entre las causas de muerte y cada categoría de peso, los investigadores afirman que las personas con sobrepeso registran una tasa más baja de mortalidad porque son mucho menos propensas a morir de una gran cantidad de enfermedades, como el Alzheimer y el Parkinson, las infecciones y enfermedades pulmonares. Y ese bajo nivel de riesgo no desaparece con uno mayor de morir por otras condiciones, como el cáncer, la diabetes o las enfermedades cardíacas.

Por eso, según publica el equipo de los Centros de Control y Prevención de las Enfermedades de Estados Unidos y el Instituto Nacional de Oncología, hubo alrededor de 100.000 muertes menos de personas con sobrepeso en 2004, el último año con datos disponibles, de las esperadas si esas personas tuvieran peso normal. El estudio se publicó ayer en el Journal of the American Medical Association .

Los investigadores confirmaron también que los obesos y las personas con peso por debajo de lo normal tienen tasas más altas de mortalidad que las personas con peso normal. Pero, al buscar una explicación, hallaron que los motivos diferían según las distintas categorías de peso.

Expertos que estudiaron la relación entre el peso y la salud opinaron que, a la luz de estos hallazgos, habría que reconsiderar la definición de peso saludable. "Si utilizamos el criterio de mortalidad, el término «sobrepeso» es inadecuado", indicó Daniel McGee, profesor de estadística de la Universidad Estatal de Florida. Según la doctora Elizabeth Barrett-Connor, profesora de medicina familiar y preventiva de la Universidad de California, en San Diego, un índice de masa corporal de entre 25 y 30 puntos, que corresponde al sobrepeso, "sería óptimo".

Otros especialistas sostuvieron que existen muchos motivos para cuestionar estos resultados. "La salud va más allá de las tasas de mortalidad", sentenció la doctora JoAnn Manson, jefa de medicina preventiva en el Hospital de Brigham y las Mujeres, en Boston.

Manson agregó que otros estudios, incluidos los de Harvard, hallaron que la obesidad o el sobrepeso aumentaban el riesgo de desarrollar una gran cantidad de enfermedades, como la diabetes, los problemas cardíacos y varios tipos de cáncer. Y destacó que los kilos de más dificultan la movilidad y alteran la calidad de vida.

"Esta es la situación en cuanto a las consecuencias para la salud -dijo Manson-. Y es lo que la población debe atender."

Categorías de peso

Los investigadores suelen dividir el peso corporal en cuatro categorías -normal, bajo, sobrepeso y obesidad-, según el índice de masa corporal, que es una medida de la grasa corporal según la altura y el peso. Por ejemplo, una mujer que mide 1,65 metros sería considerada con peso normal si pesara 59 kilos; con bajo peso, si pesara 48,5 kilos; con sobrepeso, 68 kilos, y obesa, si superara los 82 kilos.

En este estudio, los investigadores compararon a todas las personas con aquellas que tenían peso normal.

El equipo, dirigido por Katherine Flegal, de los Centros de Control y Prevención de las Enfermedades, aseguró que se habían encontrado con una realidad sorpresivamente compleja. El aumento de la tasa de mortalidad en los obesos, como podría esperarse, se debía casi en su totalidad a una mayor tasa de mortalidad por cardiopatías.

En cambio, las personas con obesidad no tenían un mayor riesgo de morir por cáncer. Pero sí eran levemente más propensas que las personas con peso normal a morir por una gran cantidad de tumores que suelen asociarse con el peso excesivo, como el cáncer de colon, mama, esófago, útero, ovario, riñón y páncreas. Aun así, tenían un riesgo más bajo de morir por otros tipos de cáncer, incluido el de pulmón. Al final, el aumento y el descenso del riesgo se equilibraban.

La diabetes, en tanto, apareció en las tasas de mortalidad sólo cuando los investigadores la agruparon con la enfermedad renal en una misma categoría. La diabetes, explican, puede causar enfermedad renal. Pero, según destacan los científicos, la cantidad de muertes por diabetes sería muy baja, porque muchos diabéticos mueren de enfermedad cardíaca y, a menudo, la causa de muerte se registra como infarto.

El estudio comenzó hace varios años cuando los investigadores utilizaron datos nacionales para analizar los distintos tipos de riesgos de muerte según el peso corporal. El equipo concluyó que la población con sobrepeso tenía menos riesgo de morir que las personas con peso normal, mientras que las personas con bajo peso u obesidad tenían más riesgo.

Esto llevó al equipo a preguntarse: si ser flaco o gordo afecta la expectativa de vida de una persona, ¿de qué enfermedades estarían protegidos y ante cuáles estarían más en riesgo?

La investigación incluyó el análisis de datos de tres encuestas nacionales sobre salud y nutrición del Centro Nacional de Estadísticas de la Salud a una cohorte representativa de la sociedad estadounidense que se pesa, se mide y se controla hasta que muere. La causa de muerte se determinó según el certificado de defunción.

El equipo advierte que aún no se puede hablar de una relación causa-efecto. "Si se siente bien, hace ejercicio y su médico está conforme con los resultados de sus análisis, no estoy tan seguro de que tenga que modificar su peso con urgencia", opinó el doctor Mitchell Gail, uno de los autores del estudio.

Gina Kolata
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