Blog Party (Del prepucio al amanecer y tu irritación vaginal tambien)

Fue antes de estar en ti, mi piel cascabel te arrancó las uñas, hace tanto tiempo que no amanezco entero.
El cielo flaco y negro un clima tibio persistente estático, tu edad era un problema pero de esos que se solucionan con una peluca y mucho make-up, te metí mi puño y gritaste (un orgasmo muy sangriento) pero sólo estaba bromeando y te agotaste, dijiste “quieres ser mi hermano adoptivo” y te dormiste, la tarde continuó con música muy tenue y el punk rock se te metió entre las piernas, el resto del día me rasure bebí té y vi en la televisión que las pesadillas son más reales si eres un sentimental como niña de kindergarden y fumas pitillos rancios, yo sólo quería uno de tus stickers rosas pero te corté un dedo y de ahí otro y te cosí los labios y te tome cariño, en estas cosas manda el corazón, se cerró la puerta detrás de ti y la luna estaba glotona, nada nos paró ni tu estúpido puñetazo en mi nariz ni el cloro en tu estomago, eres muy fashion cuando estas desnuda y no puedes escapar de un cuchillo oxidado, te pusiste roja y soltaste 10 palabras: Todo lo que soy está destruido y es para ti.
La anemia es Rosa y muy corriente en la juventud, es por culpa de la radio y los elegantes comerciales de cigarrillos, es mejor rodearse de gente positiva, seropositiva de preferencia, y pensar que el presente es mejor que ser turista en tu estado, es mejor que ser un despojo solitario y todo menos humano con aliento exquisito y un pin ensangrentado pero seco tallado a mano, al otro día llegó él, era muy atractivo aunque llevaba un traje anticuado olía a vino antiquísimo, nadie le tenía miedo pero nadie le abrió hasta que saco un carrito de supermercado y tocó a la puerta, eran sus 21 años mal llevados los que le permitieron entrar, ahí encima estaba una chica con pestañas de spaghetti que se resistió, resistió resistió todos sus encantos, él le regaló una amapola, ella la rechazo, le dio un osito con bombones, mentitas, dibujos graciosos y fetos en caramelo, no los quiso, pero seis meses después mientras la estufa explotaba y la fiebre por la música ecuatoriana le ablandaba el corazón, ella decidió cortarle el prepucio para así volar dar vueltas y volver contenta a sus raíces prehispánicas, el chico no resistió y con tristeza tocó en el órgano de la iglesia una oda al prepucio carmesí (y ahí lo comprendió todo).
En plena toma de agua sin paraguas, con dos lunares en la espalda, en bata de baño te esperé llorando, dejaste una nota que se la llevo el cartero y nunca supe que decía, ya ni las estrellas me parecían un cliché estallando en llanto sordo ensimismado desesperanzado, era la serena inocencia que volvía sinceramente del flujo que te obsequie, alguna vez pasaste en coche y arrojaste besos en una cantimplora recta que yo guarde en mi sostén (que daría yo por un abrazo de delfín con tus piernas cortas), si mi amor hay birria en Marte pero es para tu lunch y la mitad es de los niños a menos que los mates de hambre al cabo que es la moda, una vez me imagine que tu voz era muy bonita y que si un día te ibas no lo soportaría pero el tupperware lleno mi vida y la mierda lleno mi culo y tu ya no eras ni lo minimamente necesario para ser un hombre, entonces puse un anuncio en el periódico: “Se busca infección de todo tipo con cualquier tipo tipo Topo Giggio sangre tipo A+ que tenga la película de El Topo y totopos podridos”, tuve once mil llamadas pero lo que me vaciaba era tu pene chiquito, me colgué con el cable de la plancha y me mie sobre tu calendario supersexy de la virgen de Guadalupe metiéndose un Cristo por el ombligo.
Empecé a odiar el manto verde de tus hombros, caminando a trozos se toman pésimas decisiones, era una tarde pintada al óleo aún no se sentía lo terrible que iba a ser, entre tú y yo hay nervios cataplasmados, me lancé a tu cuello trillones de besos tantas veces que se me atoro tu piel, quisiste ser fisión nuclear en mí y respirar mis flemas amarillas, cantando números te tome la pierna el ombligo las caderas los senos la oreja los ojos la nariz el cabello la boca la otra pierna tu vagina el jugo un suspiro te lavaste los dientes y fuiste mi koala silencioso por siempre a media luz y con tanto color apartado.
Mentir y mentir es una felicidad vivir tan poco con tan sólo 10 años, yo existía en el espíritu peligroso de un control de videojuegos con 70 botones para lo mismo y variaba mis sentimientos, Axelina me buscaba y huía me daba vomito porque a esa edad uno no se quiere casar ni experimentar la muerte chiquita, en la noche subía al techo e inmenso en mis pensamientos tronaba estrellas oía la estación local en esos pitidos huecos tan felices que bailaba deshecho con sopa de pollo, tenía erecciones y no dormía, quería desaparecer para verte el día de ayer cuando aún estabas inconsciente.
Terribles señales de que no había esperanza pero preferí no preguntar y abrazarme a ti a las 6 de la mañana y guardar tus muecas amistosas en una cápsula de tiempo, a partir de ahí no fui a la escuela, eras muy amable me dabas galletas de canela y se me atoraban en las babas entonces me aferraba a tu caspa y te olía pausadamente, sabía pero no quería hacerte llorar, no creo en las festividades latinas para mi dame ruido y un poco de misterio veras que te mirare confundido en el centro los besos más pequeños que puedan existir y harán implosión en tu clítoris descendiendo por los planetas nadando en pleno noviembre aunque te quedes dormida yo te tomare la mano verde.
He pensado en el espejo y tu rimel, especulando que existe entre tú y yo, tanto escándalo por un labial ice cream, pero todo fue perfecto en proporciones de comida china de 35 pesos, expiramos extrañando formas humanas y suspiros abajo, abajo hay eso. aquello que nos falto esa noche, despacio y congelándonos en gerber, ve ve ve espera...
Estoy ahí arriba, donde el temor se hace añicos y te tomare sin ropa sobre tu cadera radiante, a muerte súbita.

Monchie Horror
monchiehorror.blogspot.com